y tus pies dibujan palabras que articulan la vida.
Andas cuando escuchas
y descifras mensajes que te rozan la piel.
Escuchas cuando callas
y permites que broten las otras voces.
Callas cuando ríes
y tu cuerpo se relaja, se abandona a lo que es.
Ríes cuando miras
y tus ojos reflejan una curiosidad inocente.
Miras cuando escribes
ese
lento fluir de unos
pasos
que manchan el papel.
Escribes,
andas, escuchas, callasríes y miras... te abandonas al suave transcurrir de las horas,
que revolotean impulsadas por el viento
y dejan en la ventana preguntas sin responder.