Te
sientes atrapado en el personaje, envuelto en una mentira que creada
poco a poco no controlas. Percibes que proyectas una imagen falsa que
te obliga a actuar. Dudas, dudas de todo, de lo que haces, de los que
dices, de lo que representas…, dudas de ti. Despliegas con sigilo y
sin darte cuenta una actitud, un gesto prolongado con el que ocultas
las dudas... una pose, al fin y al cabo solo una pose, hueca y falsa
con la que encubres el vértigo que domina tus pasos.
sábado, 6 de junio de 2015
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