"...Quien siempre sabe a donde va nunca llega a ninguna parte, y que sólo se sabe lo que se quiere decir cuando ya se ha dicho."
(Javier Cercas, La velocidad de la Luz)

domingo, 24 de marzo de 2013

Recordando a Petra

El 1 de octubre de 1992 moría Petra Kelly junto a su compañero Ger Bastian, él le disparó a ella y después se suicidó, muchos piensan que fue una muerte pactada, un suicidio conjunto cansados de la deriva de un mundo que no aceptaban, quiero pensar que fue así, que fue un acto de desobediencia.




Sus palabras en el Bubdestag en noviembre de 1983 se vuelven hoy imprescindibles:

Todo poder estatal es relativo. Si se entiende la obediencia como elemento de convivencia, la lealtad tiene sus límites allí donde se pone en juego el bien de la comunidad. El sí al Estado es siempre un sí condicionado. La constatación innegable de la injusticia de un mandato es criterio decisivo para la oposición a determinadas prescripciones de la autoridad estatal. [...] La cuestión decisiva es que las leyes del Estado no son leyes absolutas... En determinados casos, en los que están en juego cuestiones de gran relevancia moral, la desobediencia pacífica a la ley, acompañada de determinadas medidas de precaución que ayudan a mantener el respeto a la institución del derecho, no sólo es legítima, sino que se convierte en una obligación de conciencia.”





Primero,
dicen que fue primero, un disparo seco, a bocajarro, en tu cabeza.
Luego,
dicen que fue luego, un disparo frio, firme, en la suya.
Silencio,
después el silencio y el lento brotar de la sangre..., la vida escapada.
Miedo,
si mucho miedo, angustia y desazón cuando las cucarachas gamadas invaden la hierba.
Fuego.
Te fuiste gritando ¡no hay salida! No hay salida escribieron las balas tras el fuego.
No hay salida,
Petra, no hay salida, no hay aliento, solo un recuerdo dormido.


1 comentario:

  1. Excelente recuerdo y buena forma de expresar una idea: el miedo.
    besos

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