"...Quien siempre sabe a donde va nunca llega a ninguna parte, y que sólo se sabe lo que se quiere decir cuando ya se ha dicho."
(Javier Cercas, La velocidad de la Luz)

jueves, 24 de marzo de 2011

Un tipo extraño. Relato

El señor García es un tipo extraño, quizás algo neurótico. Un día decidió que le estorbaban los pies, los consideraba torpes y quejicosos, y sin pensárselo dos veces, se los cortó. Más tarde se obsesionó con los ruidos, consideró a las orejas como órganos hostiles y se deshizo de ellas. Con el tiempo comenzaron a molestarle los olores, sentía verdaderas nauseas que no desaparecían, aplicó el mismo remedio que en anteriores ocasiones y cercenó la nariz. Pasó un tiempo tranquilo moviéndose en silla de ruedas, aislado de los ruidos y olores molestos. Pero la felicidad no es eterna y una mañana se fijó en la boca, ¿para qué servía esa cavidad plagada de dientes que a veces le mordían la lengua causándole un dolor insoportable?. Empleó la solución conocida y, desencajando las mandíbulas, se deshizo de ella, tan solo quedo un orificio por el que mediante un tubo ingería alimentos triturados. Esta vez la dicha fue más efímera. Una noche se miró al espejo, no le gustó lo que vio y se arrancó los ojos. Cuando terminó, ordenó a sus manos que abrieran el cráneo, extrajeran el cerebro y lo depositaran en un tarro de cristal. Desde entonces el señor García es feliz, ni ve, ni oye, ni habla, ni siente, ni se mueve, tan solo piensa, piensa y piensa. Mas de tanto pensar ha comenzado a cuestionarse la validez del pensamiento y busca una solución a su nuevo problema.

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